Asset Management Europe - Carta Mensual Enero 2024

08.01.2024

Las condiciones financieras globales se han relajado gracias a la confianza en que la inflación seguirá cayendo y los bancos centrales flexibilizarán sus políticas monetarias sin una caída significativa de la actividad económica. Esta ola de optimismo se ha visto impulsada por la resiliencia de la economía estadounidense y el sorprendente cambio en la comunicación de la Reserva Federal. ¿Es EEUU el canario en la mina de carbón?

China y EEUU sorprenden a los economistas

A principios del año pasado, había mucho optimismo en cuanto a que en 2023 la economía china se recuperaría con fuerza. En cambio, se esperaba que la economía estadounidense se viera sometida a una presión significativa debido a los fuertes aumentos de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal. Sin embargo, como suele ocurrir, este escenario no se desarrolló según lo planeado.

El PMI manufacturero de China finalizó el año con una nota muy débil, ya que la disminución de los pedidos en el extranjero y la insuficiente demanda interna siguen siendo desafíos clave. En el sector de servicios, el índice se mantuvo sin camios en 49,3, el nivel más bajo (excepto el período de la pandemia) desde que comenzó la encuesta en 2012, lo que sugiere que los consumidores siguieron siendo cautelosos a la hora de gastar en medio de la ansiedad por el empleo y el mercado inmobiliario.

Por el contrario, los economistas han estado revisando constantemente sus pronósticos del PIB estadounidense para 2023. En general, aunque el desempeño superior de EEUU fue impulsado por factores temporales que es poco probable que se repitan, y aunque es probable que se avecine una debilidad del PIB en medio de los retrasos de la política monetaria, los consumidores estadounidenses ayudaron a sostener el crecimiento a pesar del aumento de los costos de endeudamiento, mientras que el desempeño de China fue decepcionante.

La Reserva Federal actúa como un llanero solitario

La inflación general ha disminuido rápidamente en la mayoría de las economías durante el año pasado, pero la inflación subyacente sigue a cierta distancia de su objetivo. De hecho, a pesar de la caída del PIB entre el tercer trimestre y el 2023 en la mayoría de las economías avanzadas, los bancos centrales han advertido que la política monetaria probablemente deba seguir siendo restrictiva hasta que haya señales claras de que las presiones inflacionarias subyacentes se han reducido de manera duradera.

En cambio, parece que la Reserva Federal decidió ejecutar su tan discutido giro hacia una política monetaria menos restrictiva. En consecuencia, el rendimiento a 2 años, más sensible a la tasa de política de la Reserva Federal, cayó significativamente ya que los inversores prevén ahora casi seis recortes de 25 puntos básicos en 2024. También hubo un cambio dramático para el rendimiento del Tesoro a 10 años que, después de casi superar el 5% a raíz de la reunión del FOMC de septiembre, cayó por debajo del 4%, lo que refleja la creencia de los inversores de que se ha alcanzado el pico de las tasas para este ciclo.

En general, todo esto alimenta el debacle actual sobre si la inflación siempre fue transitoria o si es posible una desinflación inmaculada, es decir, una reducción de la inflación sin un cierto grado de dolor para una economía. El jurado aún está deliberando.

Skobiakov & Associates Consulting 
Todos los derechos reservados 2023
Creado con Webnode Cookies
¡Crea tu página web gratis! Esta página web fue creada con Webnode. Crea tu propia web gratis hoy mismo! Comenzar